Como sabemos, la fabricación de semiconductores es un proceso prolongado, y algunas obleas en particular tardan varios meses en su viaje desde la fabricación inicial hasta que se completan. Esto significa que es un negocio particularmente sensible en lo que respecta a cortes de energía o interrupciones generales del servicio. Todas las líneas de fabricación de semiconductores, y los productos que contienen, en varias etapas de producción, pueden volverse inutilizables debido a estos eventos, lo que tendrá un impacto considerable en la producción final de fabricación de una fábrica determinada. Queda por ver la escala de este impacto en la producción, pero una diferencia de pocos puntos porcentuales en la fabricación global de semiconductores en general podría tener graves implicaciones para la disponibilidad y los precios, considerando la capacidad operativa ya insuficiente en lo que respecta a la demanda. Teniendo en cuenta el impacto que las temperaturas adversas están teniendo en los residentes de Texas, esperamos una rápida resolución de estos problemas, que afectan mucho más que las capacidades de fabricación de semiconductores.
